El mercado cambiario no logra levantar cabeza, ni siquiera con el recambio turístico que se está produciendo en el inicio de la segunda quincena de enero. La actividad en las casas de cambio de la city tucumana fue escasa otra vez debido al poco margen de validaciones de operaciones, por parte de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). En el mercado informal, en tanto, la cotizaciones del dólar y del real volvieron a marcar sus diferencias respecto de los valores oficiales. El "blue" se negoció a $ 7,30; mientras que el real superó la línea de los $ 3,60.
La plaza de compraventa de divisas extranjeras operó a un ritmo bajo, casi exiguo. Ese comportamiento se registró ante la caída de la demanda de billetes extranjeros y una mayor intervención del Gobierno. El actual escenario también incluyó una merma del número de oficinas habilitadas de compraventa: una de estas dejó de atender por unos días con motivo de las vacaciones.
"Hay pocas operaciones. Es una situación llamativa teniendo en cuenta que ha comenzado la segunda quincena de enero. En años anteriores se había registrado un incremento de la demanda producto del recambio turístico", dijo un agente de cambio a LA GACETA.
"Nos habían adelantado que la AFIP iba a efectuar un mayor control en esta época, y se está cumpliendo lo que se había anticipado", agregó el operador.
La intervención del organismo recaudador se visualizó, según indicaron en el sector, en la "caída" del sistema de constatación de comprobantes electrónicos, o validaciones. "La página permanece activa durante 30 minutos o una hora", describió otro agente cambiario. A ello se sumó que el ente recaudador convalidó menores montos cuando se llegaron a autorizar los movimientos cambiarios. El dólar oficial cerró ayer a $ 5,25 y el real, a $ 2,70, para el público, en promedio.
El movimiento en la city provincial, donde se concretan las transacciones oficiales, difirió de las negociaciones efectuadas en las "cuevas". Las operaciones se elevaron en este último segmento debido al cepo. Por eso el dólar y el real alcanzaron picos en la cotización.
La divisa de EEUU se adquirió a $ 7,30, con una base en el inicio de semana de $ 7,22. Mientras que la moneda del país vecino superó la barrera de los $ 3,60, llegando a equipar el valor de cotización en el mercado irregular de Capital Federal, a $ 3,90, según se supo.
De esta forma, la brecha entre las cotizaciones formal y paralela se extendió a un 39% y un 44% para las divisas norteamericana y brasileña, respectivamente.
A su vez, la oferta de reales en las casas de cambio continuó siendo limitada. Aunque los operadores provinciales estimaron la llegada de una partida de la unidad monetaria de Brasil, lo que permitirá abastecer la plaza.
La tendencia porteña
El dólar paralelo saltó 10 centavos -un 1,38%- y cerró a $ 7,36 para la venta en la plaza porteña. De esa forma, se amplió a casi un 50% la brecha que lo separa del oficial, que corrigió al alza hasta $ 4,97. "Hay un pico estacional por turismo, ya que durante la segunda quincena de enero es cuando más se demandan divisas, a lo que debe sumarse la escasez de dólares", dijo Gustavo Quintana, de PR Corredores de Cambio, consignó la agencia DYN.
El dólar paralelo sumó 8,4% desde los $ 6,79 que registró en la última rueda de 2012, y cerró 48,1% por encima del que se vende en pizarras de bancos y casas de cambio de la city porteña. La escalada del dólar paralelo impulsó los negocios de contado con liquidación, mediante los cuales se compran activos bursátiles en pesos en la plaza local y se liquidan en dólares en el exterior, que subieron hasta un tipo de cambio implícito de $ 7,25.
En el mercado oficial, en tanto, operó sin sobresaltos y el dólar mayorista cerró con una merma de dos milésimas, a $ 4,949, luego de que el lunes subió nueve milésimas.
El real, en tanto, operó equilibrado en 2,035 por dólar; mientras que en el mercado porteño quedó a $ 2,68. El euro cerró a $ 6,61.